Del Caño: "Scioli no es un tipo progresista por más que ahora viaje a Cuba"

En diálogo con Infobae, el precandidato a presidente por el PTS Nicolás del Caño tildó de "conservadores" a sus rivales en el FIT y aseguró que "si Scioli y Macri dijeran lo que van a hacer, no tendrían apoyo popular"

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 Adrián Escandar 162
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Con 35 años, Nicolás del Caño es uno de los precandidatos presidenciales más jóvenes en disputar las primarias. Nacido en Córdoba, en el seno de una familia de militantes trotskista, el dirigente del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) comenzó su militancia en la izquierda clasista a los 15 años, en el centro de estudiantes del colegio al que concurría. Hace dos años, fue electo diputado nacional por Mendoza, adonde se había mudado para cursar sus estudios de sociología y donde tuvo contacto con diversas luchas, al tiempo que trabajaba en call centers, bares o como vendedor de ropa. Este domingo, junto a Myriam Bregman, enfrentarán en la interna del Frente de Izquierda y los Trabajadores a la lista "Unidad", que lleva a la fórmula de Jorge Altamira (Partido Obrero) y Juan Carlos Giordano (Izquierda Socialista).


Del Caño, junto a Bregman o el diputado salteño Pablo López (PO), es parte de una nueva generación de dirigentes de izquierda que protagonizó en los últimos años, junto a otros históricos, un importante crecimiento electoral incluso "remando contra los grandes aparatos". "En 2011, de 600.000 votos pasamos a un 1.200.000. Logramos tres legisladores nacionales, diputados en todo el país", explica. ¿Por qué han logrado aumentar su caudal electoral? La explicación de Del Caño apunta a "los sectores precarizados de la juventud": "nos votan a nosotros porque no ven que la supuesta década ganada les haya significado algo para ellos que les mejore su nivel de vida". Por eso, dice, "no se le debe nada al kirchnerismo": "Se ve que aplican esas políticas, que siguen beneficiando a los grandes empresarios, los grandes capitalistas, mientras la clase trabajadora en años récord de crecimiento sigue con estos niveles de precarización laboral enormes", añade.

 Adrián Escandar 162
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El ascenso de la izquierda llevó a Del Caño al Congreso. Para el precandidato, esa presencia "logró visibilizar voces que antes no estaban, y plantar una agenda de los trabajadores". Desde ese lugar, acompañó movilizaciones -"nosotros no estamos presentes en una marcha para sacarnos una foto", dice- lo que lo llevó a ser objeto de un ataque por parte de una "patota" de Smata. "Fue porque nuestro rol como legisladores no solamente estuvo dentro de la cámara, levantando la voz de los trabajadores, las mujeres y los jóvenes, sino que también estuvo en las calles, y eso no solamente lo destacan sectores de izquierda sino también de todas las fuerzas políticas", añade.


El FIT marca "la confluencia de la izquierda clasista", "que no se integró al gobierno y que no estuvo con las patronales agrarias" y que tampoco "hizo alianzas con la centroizquierda", se jacta Del Caño.

En diálogo con Infobae, el precandidato a presidente por el PTS Nicolás del Caño tildó de "conservadores" a sus rivales en el FIT y aseguró que "si Scioli y Macri dijeran lo que van a hacer, no tendrían apoyo popular"
-Para principiantes: ¿qué es un trotskista? ¿Qué lo diferencia del resto de la izquierda?

-Nosotros postulamos la necesidad de un gobierno de los trabajadores y queremos en ese sentido que todos los recursos de la economía estén en manos del conjunto del pueblo en función de las necesidades de las grandes mayorías y no apostamos a humanizar ni reformar el capitalismo, que nos parece lo más utópico que hay. Lo más realista es lo que planteamos nosotros, que solamente haciendo una transformación social profunda con un gobierno de los trabajadores, y que los que hoy son dueños de todo dejen de serlo, y pase la gran riqueza... Fijate que Argentina produce alimentos para 400 millones de personas y hay desnutrición infantil, hay hambre, eso solamente se explica por ese pequeño puñado de capitalistas que se apropia de la riqueza que genera la gran mayoría del pueblo trabajador.


Consultado por Infobae, el precandidato ensaya algunas definiciones sobre qué es "ser de izquierda". Dice que "es una falta de respeto decir que Kicillof es marxista" y que "el kirchnerismo es una coalición donde existen sectores que se reivindican progresistas, que se subordinaron a sectores claramente de derecha como podría ser Scioli". "Scioli no es un tipo que por más que el kirchnerismo nos quiera vender que es un progresista y que ahora viaje a Cuba a sacarse la foto con Raúl Castro", sostiene.


-Durán Barba dice que el PRO es un partido de izquierda.

 Adrián Escandar 162
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Este año, a diferencia de las elecciones anteriores, el FIT no logró llegar a un acuerdo en la conformación de las listas e irá a internas para definir las candidaturas a puestos ejecutivos, lo que agitó el fantasma de las rupturas y divisiones. "Hay una especie de prejuicio hacia la izquierda, o cliché, porque de la derecha nadie dice que están divididos, y están divididos... Son un montón, y van todos separados", dice Del Caño.


-El día después de la interna, ¿va a ser como el peronismo, que el que gana conduce y el que pierde acompaña, o puede quedar alguna tensión?

-Yo creo que el Frente de Izquierda va a quedar unificado en la elección de octubre. Nosotros siempre tenemos discusiones, siempre tenemos debates, a veces se dan en términos más fuertes, pero siempre en el marco de que nosotros compartimos una perspectiva que es un gobierno de los trabajadores, y en ese sentido nosotros tenemos un objetivo en esta elección que es conquistar nuevos puestos de lucha, diputados nacionales, legisladores en las provincias donde todavía no se ha elegido, y eso lo vamos a llevar adelante juntos después de octubre, gane quien gane.


La disputa generacional es uno de los telones de fondo del desacuerdo con el PO. "En todo el país se viene planteando este surgimiento de nuevos dirigentes y nosotros queríamos platear eso dentro del Frente de Izquierda. Propusimos una fórmula unitaria, que los compañeros que encabeza Altamira no lo consideraron de esa manera", explica y añade: "Los compañeros creo que no ven este surgimiento de nuevos dirigentes, inclusive el mismo Partido Obrero, como se dio en Salta con Pablo López, que nos ha permitido creo yo perforar el techo que históricamente tuvo la izquierda con sus históricos dirigentes". Para el precandidato, sus socios del PO "entienden de una manera más conservadora la orientación del Frente de Izquierda. No se proponen pegar un nuevo salto y ver que nosotros logramos que sectores que antes votaban al peronismo tenemos más apoyo (...) Es muy importante profundizar eso".

 Adrián Escandar 162
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-¿La izquierda tradicionalmente tiene o tuvo un problema para sacar nuevos dirigentes? Se me ocurre porque algunas de las principales figuras vienen desde el 83. Altamira, Zamora...

-Yo creo que son compañeros que han tenido una trayectoria de lucha muy importante. Más allá de que con Zamora no compartamos el mismo espacio dentro del Frente de Izquierda, respetamos la trayectoria de Luis y de Jorge Altamira. Nosotros creemos que tantos años de lucha que han estado siempre de este lado son un gran mérito y han permitido que surjan nuevas generaciones. El tema es el no querer desarrollar y profundizar eso, sino esa cerrada negativa creo que es lo que ha impedido que se dé una lista unitaria del Frente de Izquierda para las PASO. En realidad, como somos dos fuerzas, por un lado nuestra fuerza que es el PTS, y por el otro el Partido Obrero, consideramos, como no había posibilidad de integrar fórmulas -por ley, no se permite integrar fórmulas-, que hubiera una lista unitaria y de última competir en las demás categorías si no había acuerdo en los distintos distritos. No hay que tomarlo como algo tremendo, sino que es una fuerza que viene en crecimiento, que tiene distintos matices en cómo se tiene que desarrollar, y para nosotros pegar un nuevo salto significa profundizar lo que se viene dando.



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