España y el tiempo del cambio

España y el tiempo del cambio

España cayó incontestablemente ante Italia en octavos de final de la Euro 2016 y en sólo 24 horas se han escuchado todo tipos de razones, excusas y motivos para lo que es considerado por todos una gran debacle.

La falta de compromiso de los futbolistas, su mal estado físico tras una temporada larga que ha visto a tres de cuatro finalistas de los mejores torneos continentales ser clubes españoles, el poco ojo de Del Bosque a la hora de hacer la lista, el peso innecesario de los veteranos que ya defraudaron en Brasil, o el simple hecho de que el seleccionador sea el mismo desde hace ocho años, son algunos de los esbozos de razonamiento que se han podido leer o escuchar en España a lo largo del día, pero más allá de buscar culpables se debería buscar soluciones.

Lo cierto es que España no dio el do de pecho. Un equipo repleto de campeones (tanto con sus clubes como con sus selecciones) y que además se conocen de sobra, debería haberse plantado --como mínimo-- en las semis de un torneo venido a menos, donde Inglaterra ha perdido con Islandia, Portugal anda de capa caída, Bélgica no acaba de explotar, y otro grande como Holanda ni si quiera clasificó a la fase final. El torneo ponía a Francia, Alemania, España e Italia en una posición privilegiada para poder llevarse la Copa, y La Roja además tuvo la fortuna de que, gracias a un sorteo benigno, de haber quedado primero de grupo sólo tenía que batirse con Portugal e Inglaterra para plantarse en la final.

Pero el partido de Croacia, el tercero del grupo inicial tras dos encuentros primorosos en lo que ha estilo y fútbol se refiere ante la República Checa y Turquía, hizo cambiar el destino de los de Del Bosque. El gol de Perisic precipitó a España a la parte complicada del cuadro de segunda ronda, y ahí demostró el combinado nacional español no estar preparado para pelear con los grandes.

Italia echó a España a las primeras de cambio, y ahora toca recoger los pedazos de la derrota y afrontar el futuro con ganas de brillar en Rusia 2018.

De primeras, parece que Vicente Del Bosque se jubilará con el sabor amargo de la derrota tras haber ganado un Mundial y una Euro con La Roja. El seleccionador no aclaró su futuro tras el partido pues pretende comunicarle su decisión a la Federación el día 14 de julio, cuando el presidente Ángel María Villar intentará de cualquier manera mantenerle en el puesto. Sin embargo, será difícil convencer a un hombre curtido como Del Bosque de cambiar su decisión, por lo que se abre un abanico de posibilidades como nuevo seleccionador: La afición, según diferentes encuestas, quiere a Paco, el nuevo entrenador del Granada, en el puesto pero Caparrós, Valverde o Marcelino también serían opciones viables.

En cuanto a los jugadores, el seleccionador que llegue se encontrará con el buen trabajo de su predecesor en el puesto. La estructura de la Federación permite contar con los Sub-21 y con la generación que ganó la Euro Sub-21 hace tres años como primeros espada. Es de esperar que la vieja guardia dé paso a los Koke, Thiago, Isco, Morata, Saúl, etc.

Y como no, a Iker Casillas le tocará enfilar la puerta de su retiro de la selección. El arquero del FC Porto colgó un enigmático mensaje en twitter con una escena de Rambo II que decía: "¿Odiar a mi país? ¡Moriría por él! Quiero lo que ellos quieren, y cualquier otro que viniera aquí a dejarse las tripas: que su país lo quiera tanto como nosotros lo queremos", dando a entender que la época dorada del capitán de la selección llega a su fin 16 años después de su debut ante Suecia en un amistoso previo a la Euro 2000.

Tras la tormenta llega la calma, y es hora de empezar a mirar adelante. Al fin de cuentas, España cuenta con una camada de jugadores muy importantes que puede perfectamente recoger el testigo de sus predecesores y, quizás así, lo de esta Euro 2016 no quede más que en un mal sueño.

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