No está hecho, pero anda cerca. El Electrocash Cáceres Patrimonio de la Humanidad anhela organizar del 24 al 27 de febrero la fase final de la Copa del Rey de voleibol masculino. "Hay posibilidades, pero todavía no se ha cerrado ni se ha firmado todavía el contrato", aclara el presidente del club y de la propia Federación Extremeña de este deporte. En las palabras de José Carlos Dómine se trasluce prudencia, sí, pero también optimismo. Es algo en lo que se lleva trabajando meses y que, en su recta final, no se quiere fastidiar ahora.

Como en todo, el dinero es la clave y se estima que el evento cuesta de 30.000 a 40.000 euros para afrontar todo el esfuerzo logístico que exige la Federación Española. Hay que encontrar la financiación suficiente para tres días de voleibol de gran élite, con dos partidos de cuartos de final el viernes, otros dos de semifinales el sábado y la gran final del domingo. Estarán los cinco equipos mejor clasificados de la primera vuelta de la Superliga más el anfitrión (si es que no ha estado entre esos cinco primeros, en cuyo caso el corte se ampliaría al sexto).

El Electrocash y la federación autonómica buscan la unión de las distintas instituciones y varios patrocinadores para que sea un gran evento con un marco difícilmente mejorable a nivel regional como es el pabellón Ciudad de Cáceres. "Habría que llenar el Multiusos durante tres días y mover muchas cosas", aventura Dómine, que en este tiempo de negociaciones a varias bandas sobre todo ha detectado "buena disposición".

RECUERDO DE TERUEL Dómine volvió impresionado de Teruel a principios de este año, cuando su club participó por primera vez en la fase copera. Fue eliminado a las primeras de cambio, en cuartos de final, pero tomó nota del ambiente que reinó en el pabellón aragonés durante los tres días.

En todo caso, la cuestión tendrá que resolverse entre esta semana y la que viene. "Hay que tener un poco de paciencia", destaca el dirigente, negando lo asegurado ayer por una web especializada en voleibol, Todo Voley, en el sentido de que la concesión a Cáceres era ya un hecho. Habrá que esperar un poco más para la oficialidad, pero todo hace indicar que Extremadura está muy cerca de asegurarse su primer gran acontecimiento deportivo del 2016.