Dani Navarro no tiene roto el quinto metacarpiano

El ciclista gijonés Dani Navarro, que se tuvo que retirar de la Vuelta a Andalucía por una dura caída, tiene rotas dos costillas, pero no se ha fracturado el quinto metacarpiano de su mano derecha. “Al final lo del dedo es solo un edema”, aclara para ElDesmarque Asturias.

Dani Navarro se encuentra estos días en Gijón, recuperándose de la rotura de dos costillas que de momento le obligan a guardar reposo. “Lo de las costillas es muy doloroso, duele incluso al respirar”, comenta el ganador de etapa de la Vuelta a España en Cabárceno.
Pese al dolor el ciclista asturiano espera poder rodar en el rodillo este domingo, aunque no se marca una día concreto tras su renuncia a la París Niza. “El médico del equipo me dijo que descansara 10 días, pero si me veo bien probaré el domingo en el rodillo. Hay que escuchar al cuerpo”, apunta el escalador del Cofidis, que finalmente no tiene roto el quinto metacarpiano de su mano derecha tal y como se creyó tras el primer diagnóstico en el Hospital de Jaén.
“Lo bueno es que no tengo el dedo roto y las costillas curan solas”, valora Dani Navarro, al que la mala suerte le ha golpeado en este inicio de temporada. Debutó en la Vuelta a Murcia, en la que llegó a 12 segundos de los favoritos tras sufrir tres averías en su bicicleta. Después, en su tercera prueba del curso, la de la semana pasada en la Vuelta a Andalucía, se llevó un buen golpe el primer día en una de sus rodillas, mientras que en la etapa reina otro problema mecánico le impidió rodar con los favoritos.
“Iba séptimo junto a Froome y me rompió el cambio de atrás”, explica el asturiano que tenía la intención de medir su nivel con el de Alberto Contador y Chris Froome. “Me queda la duda de haberme comparado con los grandes corredores que había en Andalucía”, lamenta.
En cualquier caso el ‘top ten’ del Tour 2013 y Vuelta 2014 respira aliviado porque este “cúmulo de mala suerte” se ha producido al principio de temporada. Ha tenido que renunciar a una competición importante para su equipo como la París Niza, pero mantiene intactos sus objetivos, sobre todo el del Tour de Francia en el que quiere estar entre los favoritos y, por qué no, conquistar una etapa.
Para ello el corredor asturiano, de 31 años, apenas tendrá que cambiar su programa de preparación a pesar de las caídas. “Voy a intentar estar en la Vuelta Cataluña, que no entraba en mis planes. Queda justo un mes menos un día, así que espero estar”. Tras esta competición volverá a rodar en España en la Vuelta al País Vasco, antes de las clásicas de las Ardenas. Por último, con vistas al Tour, afinará su preparación en la Dauphiné, donde ya ganó una etapa cuando vestía el maillot del Astana.