Así cuenta un científico del CSIC cómo les ha afectado el adelanto del cierre de gasto ministerial
El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el mayor organismo público de investigación de España, empieza a sufrir las consecuencias del adelanto del cierre de gasto de los ministerios a julio, en un movimiento del Ejecutivo para contentar a Bruselas y tratar de controlar el déficit ante la amenaza de una posible multa que de momento se ha quedado en nada.
El Ejecutivo publicó la orden en el Boletín Oficial del Estado el día 14 de julio y dio solo seis días a los ministerios para ajustar sus cuentas. Esto afectaba a los gastos no recurrentes y obligó a los ministerios a una carrera contrarreloj para poder aprobar inversiones, jornadas, becas, o programas. En el caso del CSIC, uno de sus investigadores, que firma con las siglas AMT, explica en su blog cómo con este cierre tienen, por ahora, paralizada la compra de material tecnológico necesario para algunas investigaciones o se ha bloqueado la contratación de personal necesario para algunos proyectos que están llevando a cabo.
“Yo no fui consciente de las implicaciones del cierre contable hasta el 25 de julio”, escribe este investigador. Una fecha en la que su administrador de sistemas le pidió la firma para la orden de compra de un nuevo servidor de cálculo para reemplazar a los antiguos. “A los cinco minutos de haber firmado la orden de compra volvió para comunicarme algo que no me pilló por sorpresa: todas las compras a través del sistema de compra centralizada estaban paralizadas hasta el 1 de enero, por razón del cierre contable del Estado”, explica.
Las explicaciones del gerente, según sigue narrando, fueron que por el momento “todas las compras de inventariable están bloqueadas hasta el 1 de enero de 2017”. En el caso del CSIC, parte del dinero que gasta proviene o de subvenciones europeas o de acuerdos con empresas privadas, pero este investigador cuenta que, por ahora, todo está bloqueado. A las consecuencias que puede tener el bloqueo para las investigaciones en marcha se suma otra casuística: en el caso, por ejemplo, de las subvenciones españolas hay unos plazos obligatorios para la ejecución de los proyectos. Si el dinero no se usa para lo que está previsto hay que devolver la parte no ejecutada más unos intereses anuales del 7%.
Contratación de personal
“Otra consecuencia del cierre contable es que probablemente tampoco se puede contratar nuevo personal con cargo a proyectos o contratos hasta el 1 de enero de 2017”, apunta en el mismo post. Esta situación puede poner en dificultades las investigaciones y proyectos en curso.
“Ese personal es fundamental para la ejecución de los proyectos de investigación, y si por cualquier motivo la disponibilidad de fondos tuvo lugar en el segundo semestre del año los investigadores responsables tendrán problemas para ejecutar las tareas previstas en los plazos indicados, ya que durante seis meses no podrán contratar a nadie”, apunta el investigador.
Un hecho que se suma a los problemas que ya ha tenido el centro con su personal. En los últimos años ha enlazado diversos contratos con similares funciones y el personal afectado ha reclamado al organismo que sus contratos se conviertan en indefinidos.
“El CSIC siempre se niega a atender tal reclamación y los afectados demandan al CSIC, y en casi todas las ocasiones el juez da la razón al trabajador, por lo que el CSIC se ve obligado a hacerles contratos indefinidos y, en ocasiones, a crear plazas con su perfil que después salen a oposición y que generalmente las ganan los mismos que demandaron”, explica el investigador, que apunta que más de 600 personas han conseguido estabilizarse en el CSIC durante los últimos años.
Esta situación, señala, no ha gustado al Ministerio de Hacienda. “No se paran a pensar que en el período de tiempo que va de 2008 hasta nuestros días habrán entrado por la puerta falsa esos 600 y pico trabajadores, pero al mismo tiempo han salido unos 5.000 por la de delante y así de manera neta el organismo ha perdido más de 4.500 trabajadores o alrededor del 30% de la plantilla”, apunta.
Este diario se ha puesto en contacto con la Secretaría de Estado de Investigación del Ministerio de Economía, de la que depende el CSIC, para obtener su versión sobre el tema, pero no ha recibido respuesta.
